
Cómo hacer "šunkafleky" que unen generaciones y saben genial

Šunkofleky - un clásico checo tradicional que todavía deleita hoy
¿Conoces ese platillo que te recuerda el aroma de la cocina de tu abuela cuando, al regresar de la escuela, abrías la puerta y un conocido olor salía del horno? Šunkofleky, un platillo simple y abundante de pasta, huevos y carne curada, deja precisamente esa impresión. Aunque a menudo permanecen a la sombra de otros platos de la cocina checa, como el svíčková o el guláš, tienen un lugar firme en la mesa de muchas familias. Quizás sea porque son sorprendentemente versátiles.
La receta básica de šunkofleky es simple y económica, probablemente la razón de su popularidad durante varias generaciones. En tiempos de escasez, los šunkofleky eran una forma bienvenida de aprovechar los restos de carne curada o cerdo cocido. Hoy en día, la gente vuelve a ellos no solo por nostalgia, sino también por la rapidez en su preparación y la posibilidad de diversas variaciones.
Cómo preparar šunkofleky
La receta clásica de šunkofleky comienza con flíčky cocidos, pequeñas pastas que forman la base de todo el platillo. Se mezclan con carne curada picada, huevos, especias y, a veces, cebolla. Todo se hornea hasta que se dore, formando una corteza crujiente en la superficie y una mezcla suave y aromática en el interior.
Los šunkofleky con carne curada son la variante más común, pero el uso de la carne puede variar según lo que tengas en casa. Codillo curado, paleta de cerdo, o incluso restos de jamón del fin de semana, todo es útil.
Es interesante que, aunque la palabra "šunkofleky" se utiliza a menudo en el lenguaje cotidiano, los libros de cocina oficiales lo mencionan como "pastel de pasta con carne curada". Sin embargo, el apodo popular "šunkofleky" ha calado tanto que casi todos lo usan, incluso aquellos que nunca han tenido jamón en el platillo.
Variaciones que sorprenden
Los šunkofleky no están definidos solo por una forma de preparación. De hecho, existen varias variaciones que dan a este platillo una nueva dimensión. Algunas personas disfrutan agregando queso rallado a la mezcla, como edam o gouda, que se derrite maravillosamente y le da al platillo una suavidad. Otros juran por un poco de crema o leche para una estructura más cremosa.
Cada vez son más populares los šunkofleky vegetarianos, donde la carne se sustituye por tofu ahumado, tempeh o incluso verduras asadas. Esta variante está ganando popularidad no solo entre los vegetarianos, sino también entre aquellos que buscan reducir el consumo de carne por razones éticas o ecológicas. En términos de sabor, pueden sorprender tanto como la receta tradicional.
En algunos hogares, los šunkofleky se condimentan con romero, mejorana o pimentón molido. Algunos también añaden pepino rallado o guisantes en conserva para dar frescura al platillo. Estas pequeñas modificaciones hacen de los šunkofleky un platillo único que cada hogar puede adaptar a su gusto.
Historia de una cocina
En un pequeño pueblo de Vysočina, la señora Marie prepara šunkofleky todos los jueves desde hace más de treinta años. "Siempre horneo dos bandejas. Una para nosotros, otra para los vecinos", ríe. ¿Su secreto? Flíčky caseros hechos con masa de huevo y carne curada de su propio ahumadero. "Cuando los horneo, huele en toda la calle y los niños se acercan como moscas al azúcar", añade sonriendo. Estas historias muestran cuán profundamente arraigado está este platillo en la tradición checa.
¿Qué acompaña a los šunkofleky?
Aunque es un platillo bastante sustancioso, a menudo se sirve con algo refrescante. Un clásico es la ensalada de pepino con aderezo de vinagre, que equilibra agradablemente la salinidad y densidad del platillo. Algunos disfrutan de los šunkofleky con pepinillos en vinagre o chucrut.
En cuanto a bebidas, el agua simple o un agua mineral ligeramente gasificada funcionan estupendamente, pero también un vino blanco ligero puede crear un contraste de sabor interesante. Por supuesto, en casa a menudo termina con té o refresco de frambuesa, y eso también tiene su encanto.
Šunkofleky y la cocina sostenible
Es interesante que los šunkofleky no solo pertenecen a la categoría de platos tradicionales, sino también a la de cocina sostenible. Utilizan típicamente ingredientes que son sobrantes o económicos, reduciendo así el desperdicio alimentario. Por ejemplo, si queda carne curada del almuerzo, pasta del día anterior o algunos huevos, puede resultar en un platillo completo y nutritivo.
Además, es fácil preparar šunkofleky en una versión sin carne, lo que no solo ahorra recursos naturales, sino que también hace que el platillo sea más accesible para diferentes preferencias dietéticas. En una época en la que cada vez más personas se preguntan cómo cocinar de manera respetuosa con el planeta, los šunkofleky son un excelente ejemplo de que la sostenibilidad no tiene que significar renunciar al sabor o la tradición.
Consejos para mejorar los šunkofleky
Aunque la receta básica de šunkofleky es simple, hay varios trucos comprobados que pueden elevar el platillo a un nivel superior:
- Usa pasta casera, si tienes tiempo, la diferencia de sabor es notable.
- Dora la carne curada previamente en una sartén con cebolla, para un sabor más pronunciado.
- Añade algunas hierbas frescas, como cebollino o perejil, para agregar frescura.
- Vierte un poco de crema o leche sobre la mezcla, para que el resultado no sea seco.
- Espolvorea queso rallado por encima antes de terminar de hornear, idealmente algo más fuerte, como cheddar.
¿Por qué los šunkofleky merecen un regreso a la cocina moderna?
En la actualidad, cuando se buscan comidas rápidas, económicas y nutritivas, los šunkofleky son la opción ideal. Son fáciles de preparar, la mayoría de las personas tienen los ingredientes en casa, y además, la receta se puede adaptar fácilmente a los gustos o necesidades dietéticas actuales.
Su encanto radica precisamente en esa simplicidad hogareña: en cómo reúne a la familia en una mesa sin necesidad de pasar horas en la cocina. Ya sea que los prepares según la receta de tu abuela, con ingredientes modernos o en una versión ligera sin carne, una cosa es segura: los šunkofleky todavía tienen mucho que ofrecer.
Es notable que una receta nacida de la necesidad de utilizar sobras hoy vuelva a ganar popularidad, esta vez como símbolo de sostenibilidad y regreso a las raíces. Tal vez en estas recetas "ordinarias" se esconda el futuro de la cocina casera. Como dice el conocido chef checo Roman Paulus: "Los mejores platos no son los complicados, sino los que se hacen con el corazón."
Y si esta noche no sabes qué cocinar, tal vez sea el momento de volver a la sencillez. En el horno te espera mucho más que solo pasta con carne, te espera un pedazo de hogar.