facebook
Los pedidos realizados antes de las 12:00 horas se envían inmediatamente | Envío gratuito a partir de 80 EUR | Cambios y devoluciones gratuitos dentro de los 90 días

Inspírate con recetas de tostadas para placeres dulces y salados

El secreto de las tostadas perfectas: de lo clásico a la delicia francesa

La mayoría de nosotros asociamos las tostadas con un desayuno rápido, una cena sencilla o un refrigerio veloz entre reuniones. Sin embargo, incluso una tostada ordinaria puede convertirse en una pequeña obra de arte culinaria. Ya sea que te gusten los sándwiches crujientes rellenos de queso o las dulces tostadas francesas, con algunos trucos simples y la receta adecuada, puedes preparar en casa una delicia que no desentonaría ni siquiera en un brunch de hotel.

Veamos por qué todos deberían tener su receta favorita de tostadas, cómo distinguir entre las clásicas y las francesas, y qué se puede crear a partir de una simple rebanada de pan.

Las tostadas como sinónimo de rapidez y variedad

Cuando se menciona "tostada", la mayoría de la gente piensa en pan de sándwich tostado en una tostadora. Pero bajo este simple nombre se esconde mucho más que dos rebanadas de pan con queso. Las tostadas tienen decenas de variantes: saladas, dulces, calientes y frías. Desde la clásica tostada de queso hasta sofisticadas combinaciones con aguacate, salmón ahumado o incluso arándanos y miel.

Mientras que en Chequia las tostadas están principalmente asociadas con una cena rápida, en el mundo se han convertido en la base de la gastronomía moderna. Por ejemplo, en Australia hay bistrós especializados exclusivamente en este platillo. Surge la pregunta: ¿por qué son tan populares las tostadas?

Es simple: preparación rápida, mínimos ingredientes y posibilidades infinitas de variación. Además, se adaptan fácilmente a cualquier régimen dietético, desde vegano hasta sin gluten. Puedes usar pan de centeno, de masa madre o sin gluten pan, elegir el relleno según lo que tengas en casa, y el resultado siempre será único.

Tostadas francesas: una versión dulce que acaricia el alma

Mientras que la tostada checa clásica suele ser salada y se prepara en una tostadora, las tostadas francesas (pain perdu) se fríen en una sartén y se asemejan más a un desayuno dulce que a una cena rápida. Básicamente, son rebanadas de pan sumergidas en huevo batido con leche, que luego se fríen hasta dorarse. A menudo se sirven con frutas, jarabe de arce, canela o crema batida.

Aunque su nombre suena elegante, su origen es humilde: nacieron como una forma de aprovechar el pan viejo. Y esa es la belleza de las tostadas francesas. De algo común y casi inútil surge algo excepcional. Nos recuerdan que incluso un plato sencillo puede ser lujoso cuando se prepara con esmero.

Un ejemplo de cómo las tostadas francesas pueden convertirse en una experiencia es el brunch en un pequeño bistró a las afueras de París. Pan casero recién horneado, cubierto con una mezcla aromática con un toque de extracto de vainilla, adornado con frambuesas y una hoja de menta. Al lado, una pequeña jarra de chocolate caliente que se va vertiendo lentamente sobre el plato. Sencillo pero inolvidable.

Recetas que vale la pena tener a mano

Para evitar que las tostadas se vuelvan monótonas, basta con tener una receta básica de tostadas y variarla al gusto. En casa, puedes crear tu propio "repertorio de tostadas": una receta para un dulce desayuno, otra para una cena rápida y una tercera para un brunch de fin de semana con amigos. Aquí tienes algunas ideas que siempre vienen bien.

Tostada salada con queso y aguacate

Esta tostada es una opción ideal cuando tienes poco tiempo, pero no quieres renunciar al valor nutricional.

Ingredientes:

  • 2 rebanadas de pan integral
  • 1 aguacate maduro aguacate
  • una rebanada de queso (cheddar, emmental o alternativa vegana)
  • una pizca de sal, pimienta, jugo de limón

Instrucciones: Coloca el queso sobre una rebanada de pan, cubre con la otra y tuesta en una tostadora o sartén. Mientras tanto, machaca el aguacate con jugo de limón, sal y pimienta. Después de tostar, corta la tostada y úntala con el aguacate. Puedes añadir tomate fresco o brotes.

Tostada francesa dulce con frutas

Ideal para un desayuno de fin de semana en la cama o como sorpresa para tu pareja.

Ingredientes:

  • 4 rebanadas de pan viejo (idealmente blanco, pero también puede ser de centeno o vegetal)
  • 2 huevos
  • 150 ml de leche vegetal
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • canela, frutas, jarabe de arce

Instrucciones: Bate los huevos con la leche, la vainilla y la canela. Sumerge las rebanadas de pan en la mezcla y deja que absorban. Fríe en una sartén ligeramente engrasada hasta dorar por ambos lados. Sirve con frutas frescas y jarabe.

Tostada con mantequilla de nueces y plátano

Una excelente opción para los niños o como merienda rápida después del deporte.

Ingredientes:

  • pan de tostada (preferiblemente integral)
  • mantequilla de nueces (almendra, maní, anacardo)
  • 1 plátano
  • una pizca de canela o cacao

Instrucciones: Tuesta el pan y úntalo con la mantequilla. Coloca rodajas de plátano encima y espolvorea con canela o cacao. Una combinación excelente de sabores y energía.

La tostada como reflejo del estilo de vida

Puede sonar exagerado, pero incluso una receta de tostada puede decir mucho sobre cómo vivimos. En un mundo donde el tiempo es valioso y la comida a menudo es apresurada, la tostada representa la simplicidad que no pierde valor. Puedes prepararla en unos minutos, pero al mismo tiempo tener control total sobre lo que comes, sin conservantes, sin grasas innecesarias, con ingredientes frescos y de calidad.

Además, si optas por la preparación casera, puedes elegir fácilmente opciones más sostenibles: por ejemplo, pan de una panadería local, huevos orgánicos, alternativas vegetales de leche y queso o frutas de temporada. Una tostada así no solo es deliciosa, sino también amable con el planeta.

La cita del chef y autor de bestsellers Michael Pollan lo resume a la perfección:
„Eat anything you want, just cook it yourself." — Come lo que quieras, pero prepáralo tú mismo.

Este enfoque da a las tostadas una nueva dimensión: de ser una "rápida" se convierte en un acto consciente de cuidado hacia uno mismo y el mundo que nos rodea.

Ya sea que elijas la clásica tostada de queso, una versión francesa refinada con frutas caramelizadas, o algo completamente tuyo, vale la pena detenerse un momento. Tomar una rebanada de pan, pensar qué vas a crear hoy y prepararlo con alegría. Porque incluso una tostada ordinaria puede ser un pequeño ritual, sabroso, fragante e inolvidable.

Compartir
Categoría Buscar en