
Los gofres salados te sorprenderán: prueba nuevas variantes

Cuando los gofres no son solo dulces - descubre el encanto de los gofres belgas salados
Los gofres suelen asociarse en los hogares checos con las mañanas de domingo, montones de nata, fruta fresca y el aroma de la vainilla. Pero, ¿qué sucede si los gofres toman otro camino, uno lleno de sabores que no temen a las especias, quesos, hierbas y verduras? Los gofres salados, y en especial los belgas, están ganando poco a poco su lugar en los platos de los amantes de los desayunos y cenas. Y no es de extrañar: son sorprendentes, divertidos y, sobre todo, una alternativa más saludable a los platos tradicionales pesados.
Gofres salados - regreso a la receta original
Pocos saben que los gofres originales no eran dulces. En la Europa medieval, servían como un plato sencillo, nutritivo y rápido de preparar a base de harina, agua y huevos, a menudo complementado con queso o hierbas. No fue hasta más tarde que los gofres comenzaron a endulzarse y adornarse con frutas, chocolate o nata. Por lo tanto, los gofres salados no son una moda pasajera, sino más bien un regreso a las raíces culinarias.
Los gofres belgas merecen especial atención, ya que se caracterizan por una superficie crujiente y un interior esponjoso. Gracias a los surcos más profundos de la gofrera, retienen mejor los rellenos y salsas, lo cual es ideal para la variante salada. La cocina belga es conocida por combinar simplicidad con sabores fuertes, y los gofres belgas salados cumplen esta tradición de manera excelente.
Más saludables de lo que parecen
Una de las ventajas de los gofres salados es que se pueden ajustar fácilmente a las necesidades de nuestro cuerpo. Mientras que los gofres dulces a menudo no pueden prescindir de harina blanca, azúcar y coberturas grasas, las variantes saladas ofrecen espacio para ingredientes completos - desde harina integral hasta aceites vegetales de calidad, pasando por legumbres, verduras o productos fermentados.
Por ejemplo, la harina de garbanzo aporta proteínas y fibra a la masa, mientras que la harina de avena tiene un índice glucémico bajo. Al añadir calabacín o zanahoria rallada, se obtiene esponjosidad y una porción extra de verduras. Los veganos pueden reemplazar los huevos con un "huevo" de lino o tofu, y usar una bebida vegetal en lugar de leche. El resultado son gofres salados saludables que no solo saben bien, sino que también son nutritivos.
Inspiración de todo el mundo y de casa
Una de las mayores ventajas de los gofres salados es su versatilidad. Pueden ser un almuerzo ligero, una cena sustanciosa o incluso un bocadillo inusual para la escuela o el trabajo. Cocidos hasta quedar crujientes y rellenos de ensalada de verduras, hummus o tofu asado, recuerdan a un sándwich, pero en una forma mucho más divertida.
Una variante interesante es, por ejemplo, el gofre belga con queso de cabra, cebolla caramelizada y rúcula. O una inspiración mexicana con frijoles negros, aguacate y cilantro. Otra opción es el gofre hamburguesa, donde el gofre reemplaza al pan y en su interior se esconde tempeh asado, tomate y mayonesa vegana casera. Los clásicos apreciarán la combinación de espinacas y queso con huevo frito.
También es importante la presentación: mientras que los gofres dulces piden un plato y tenedor, los salados son adecuados para "llevar en la mano". Por ello, son ideales para picnics, viajes e incluso como aperitivo para amigos. No es de extrañar que algunos establecimientos belgas de comida callejera ofrezcan gofres salados como alternativa a la comida rápida, con un valor nutricional más alto y sin necesidad de freír.
"Los gofres no son un plato, son un lienzo para tu imaginación", dice el famoso chef belga Bart Desmidt.
Receta: Gofres belgas salados con espinacas y queso
Si te apetece probar algo nuevo, la siguiente receta no te decepcionará. Es sencilla, rápida y llena de sabores.
Ingredientes:
- 1 taza de harina de trigo integral
- ½ taza de harina de avena o de garbanzo harina
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- ½ cucharadita de sal
- 2 huevos (o sustituto vegano)
- 1 taza de leche vegetal (por ejemplo, de almendra o avena)
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 taza de espinacas frescas picadas
- ½ taza de queso rallado (por ejemplo, cheddar, feta o queso vegano)
- Opcional: una pizca de ajo, nuez moscada o tomates secos
Instrucciones:
- Mezclar en un bol las harinas, la levadura en polvo y la sal.
- En otro recipiente, batir los huevos, añadir la leche vegetal y el aceite.
- Combinar los ingredientes secos y húmedos y mezclar bien hasta obtener una masa suave.
- Incorporar las espinacas y el queso, y si se desea, otros ingredientes al gusto.
- Calentar la gofrera y engrasarla ligeramente con aceite.
- Cocinar según el tipo de gofrera, aproximadamente 4-5 minutos, hasta que los gofres estén dorados y crujientes.
- Servir calientes, idealmente con un poco de verdura fresca o un dip de yogur.
Cuando los gofres cambian la rutina diaria
Los gofres belgas salados se están convirtiendo en una alternativa al pan, sándwiches o incluso quiches. Su preparación es rápida, los ingredientes son fácilmente accesibles y las posibilidades infinitas. Las personas que intentan comer sin gluten pueden prepararlos con harina de trigo sarraceno o de almendra. Aquellos que evitan los productos de origen animal pueden adaptarlos fácilmente a una dieta vegetal. Y quien disfruta de comidas sustanciosas puede acompañarlos con un huevo escalfado, tofu ahumado o un ragú de verduras.
Un ejemplo es la señora Alena de Brno, quien se enamoró de hacer gofres durante la pandemia. Cuando se le acabó la levadura, reemplazó el pan casero con gofres salados y ahora los prepara 2-3 veces por semana. "Los hago con harina de avena y garbanzo, con zanahorias, especias y semillas de lino. A los niños les encantan con hummus o incluso dulces con jarabe de arce, pero yo disfruto más los salados", se ríe.
La tendencia de los gofres salados saludables ya no es solo un capricho de los blogueros de comida: está entrando en la cocina cotidiana, donde ofrece una combinación de sabor, nutrición y originalidad. Ya sea que busques una cena interesante, un refrigerio saludable o una nueva forma de utilizar las sobras de verduras, los gofres pueden ser una idea refrescante.
Y quizás, la próxima vez que calientes la gofrera, optes por pimienta molida, ajo y espinacas en lugar de vainilla y azúcar.