
Descubra los sabores de la mostaza de calabacín y su uso en la cocina

Mostaza de calabacín - una delicia casera con un uso inesperado
Cuando se habla de mostaza, la mayoría de la gente piensa en lo clásico: una pasta amarilla que acompaña embutidos, carnes a la parrilla o salchichas. Sin embargo, aquellos interesados en la conservación casera saben que la mostaza no tiene que ser solo de semillas de mostaza. En los últimos años, ha ganado popularidad una variante menos tradicional pero igualmente interesante: la mostaza de calabacín. Este producto casero original es un excelente ejemplo de cómo combinar sostenibilidad, sabor y creatividad en un solo frasco.
La temporada de calabacines suele estar en pleno apogeo en verano y, a menudo, crecen más frutos en el jardín de los que se pueden consumir de manera habitual. Mientras que las tortitas de calabacín, las cremas o los calabacines al horno se han convertido en una parte común de muchas cocinas, la mostaza de calabacín ofrece una nueva forma de procesar esta verdura de manera duradera y sabrosa. ¿Y lo mejor de todo? A pesar de su nombre, no tiene prácticamente nada en común con la mostaza clásica, ¡y aún así su sabor te sorprenderá!
¿Qué es realmente la mostaza de calabacín?
La mostaza de calabacín es una salsa agridulce con un toque ligeramente picante, que se elabora con calabacín rallado o picado, complementado con otros ingredientes como vinagre de manzana, azúcar, cebolla, semillas de mostaza, cúrcuma y otras especias. Su consistencia recuerda a una salsa espesa o chutney y es adecuada para carnes, quesos, panes o como un untable inusual.
Ha ganado especial popularidad la mostaza de calabacín picante con cúrcuma, que además de ofrecer un sabor más atrevido, proporciona un hermoso color dorado, gracias a la cúrcuma naturalmente colorante. Esta combinación no solo deleita el paladar, sino también la vista, y además contiene sustancias beneficiosas con efectos antiinflamatorios.
¿Suena inusual? Tal vez, pero ahí radica su encanto. Como dice la conocida bloguera gastronómica checa Veronika del blog De la cocina al frasco: “La mostaza de calabacín me sorprendió por su versatilidad. La pongo con queso, en hamburguesas o como base para untables caseros de sándwich."
Receta de mostaza de calabacín - ¿cómo se hace?
La receta básica para la mostaza de calabacín es sorprendentemente sencilla y puede manejarla incluso alguien que recién esté comenzando con la conservación casera. Además, los ingredientes se pueden variar según el gusto: a algunos les gusta una versión ligeramente dulce, mientras que otros la prefieren más picante y fuerte. Sin embargo, la base siempre es el calabacín.
Aquí tienes una de las recetas favoritas para mostaza de calabacín casera con cúrcuma:
Ingredientes:
- 1,5 kg de calabacín joven rallado (sin pelar, sin semillas)
- 3 cebollas (finamente picadas)
- 100 ml de vinagre de manzana
- 200 g de azúcar moreno
- 2 cucharadas de semillas de mostaza
- 1 cucharada de sal
- 1 cucharadita de cúrcuma
- 1/2 cucharadita de pimienta negra molida
- 1/2 cucharadita de chile molido (opcional)
- 1 cucharada de aceite
Se sala el calabacín rallado y se deja reposar en un bol durante aproximadamente una hora para que suelte agua. Luego se exprime bien y se coloca en una olla grande junto con la cebolla, el vinagre, el azúcar y las especias. Se lleva a ebullición, se reduce la temperatura y se cocina a fuego lento durante unos 30-40 minutos, hasta que la mezcla se ablande y espese.
Finalmente, todo se puede batir hasta obtener una mezcla suave o dejar con una textura más gruesa, según las preferencias personales. La mezcla caliente se coloca en frascos esterilizados, se gira boca abajo y se deja enfriar. De esta manera, la mostaza de calabacín preparada puede durar varios meses con un almacenamiento adecuado.
Uso de la mostaza de calabacín en la cocina
¿Qué hacer con la mostaza de calabacín ya preparada? Las posibilidades son sorprendentemente muchas. Gracias a su sabor ligeramente dulce y picante al mismo tiempo, es adecuada como acompañamiento de quesos, complementando maravillosamente, por ejemplo, un camembert maduro, queso de cabra o cheddar. También es excelente para carnes a la parrilla, tempeh al horno o en sándwiches y hamburguesas en lugar de la salsa clásica.
Un consejo interesante es añadir una cucharadita de mostaza de calabacín al aderezo de ensaladas o usarla como base para una marinada. Gracias a la combinación de vinagre, azúcar y especias, también condimenta muy bien ensaladas de verduras.
En la vida real, ha sido apreciada, por ejemplo, por la señora Jitka de České Budějovice, quien la describe como "un tesoro casero que reemplaza los aderezos comprados y las mostazas. Es excelente en canapés, pero también con huevos o en la pasta de huevo."
Beneficios para la salud de la cúrcuma y la preparación casera
Uno de los ingredientes más interesantes de esta delicia inusual es la cúrcuma, que no solo aporta color y sabor, sino también una serie de beneficios para la salud. Según varios estudios (por ejemplo, publicados en Journal of Medicinal Food), la curcumina, el componente activo de la cúrcuma, tiene efectos antiinflamatorios, antioxidantes e incluso ligeramente antibacterianos.
Además, la preparación casera significa que tienes control total sobre el contenido de azúcar, la cantidad de sal y la calidad de los ingredientes utilizados. A diferencia de las salsas producidas industrialmente, que a menudo contienen conservantes, colorantes o espesantes, la mostaza de calabacín casera es pura y natural. Y además, procesa los excedentes del jardín, por lo que también tiene sentido desde el punto de vista de la sostenibilidad.
Consejos para variaciones y experimentos
La base es el calabacín, pero no tener miedo a los cambios puede llevar a resultados gustativos interesantes. En lugar de cúrcuma, se puede intentar añadir curry en polvo, mostaza seca o incluso manzana rallada para un sabor más dulce. Algunos reemplazan parte del azúcar con miel o utilizan vinagre balsámico para una acidez más pronunciada.
Aquellos que les gusta la mostaza de calabacín muy picante pueden añadir chile fresco picado o una pizca de pimienta de cayena. Tal versión complementa perfectamente carnes asadas, pero también platos de verduras que necesitan un poco de chispa.
Entre las innovaciones favoritas se encuentran manzana rallada o pera, que endulzan todo el plato, o mostaza de Dijon, si quieres intensificar el sabor. Quien prefiera un toque de picante, puede optar por jengibre fresco, y si deseas añadir más umami al plato, el tomate seco es la elección correcta.
Pequeños frascos, gran alegría
La mostaza de calabacín a menudo se envasa en frascos más pequeños: no solo se almacenan mejor, sino que también son perfectos como regalo comestible casero. Si buscas un regalo original y práctico para amigos o familiares, algunos frascos con mostaza preparada por ti mismo, bien etiquetados y empaquetados, sacarán una sonrisa en el rostro de cualquier amante de la buena comida.
Además, estos regalos comestibles reflejan un enfoque personal y cuidado, y en el mundo de hoy lleno de productos anónimos de los estantes de los supermercados, eso es más valioso que cualquier otra cosa.
Ya sea que la prepares para tu propio consumo, como una forma de procesar los excedentes del jardín, o como un regalo comestible, la mostaza de calabacín es una deliciosa muestra de cómo transformar ingredientes simples en una delicadeza. Este pequeño frasco combina sabor, salud y sostenibilidad en uno, y es una combinación difícil de resistir.