
Descubre la magia de los bollos de la abuela, que huelen a hogar

Vdolky - un tesoro esponjoso de la cocina checa que huele a hogar
En muchos hogares checos, los vdolky son una de esas recetas que se transmiten de generación en generación. Cuando se menciona "los vdolky de la abuela", la mayoría de las personas recuerdan momentos amorosos pasados en la cocina, el dulce aroma de la masa fermentada y el aceite caliente chisporroteando en la estufa. Este postre tradicional tiene un lugar firme no solo en el plato, sino también en el corazón de todos los que crecieron en un entorno checo. Aunque con el tiempo han surgido muchas variantes, el encanto básico permanece: masa esponjosa, deliciosa mermelada de ciruela, requesón y azúcar.
Vdolky checos antiguos y su lugar en la historia
Los vdolky no son un invento moderno. Su historia se remonta a varios siglos atrás. Nuestras bisabuelas ya los horneaban durante las festividades, celebraciones o como un regalo para los invitados. Las recetas variaban según la región y las tradiciones familiares, pero una cosa permanecía igual: los vdolky eran un símbolo de hospitalidad y abundancia. En la cocina checa antigua tenían su lugar de honor y a menudo se preparaban en grandes cantidades, no solo porque eran deliciosos, sino también porque la gente podía calentarlos fácilmente al día siguiente.
Si observamos una receta antigua de vdolky, encontramos leche, levadura, huevos, mantequilla, azúcar y harina común. Ningún ingrediente exótico, solo lo que estaba al alcance de la mano. Y precisamente en esa simplicidad reside su encanto. Hoy en día, la receta puede parecer complicada de preparar, especialmente debido a la fermentación y fritura, pero el resultado vale la pena. Cuando muerdes un vdolek recién frito con mermelada de ciruela y crema agria, te transportas en el tiempo.
Los vdolky de la abuela - una receta que huele a hogar
Cualquiera que haya tenido la suerte de probar los vdolky de su abuela sabe que sabían diferente. No se trataba solo de los ingredientes, sino del amor con el que se preparaban. Los vdolky de la abuela eran suaves, tiernos y siempre ricamente decorados, ya sea con requesón, mermelada o pasas. A menudo se añadía una pizca de ron o cáscara de limón para un suave aroma que evocaba recuerdos lejanos de la infancia.
Es interesante que cada abuela tenía su propio "procedimiento secreto". Una dejaba que la masa fermentara bajo una manta, otra solo la mezclaba con una cuchara de madera en sentido horario. Sin importar cómo se hiciera, el resultado siempre era auténtico y casero. Hoy en día, cuando estamos acostumbrados a recetas rápidas y fáciles, preparar los vdolky de la abuela puede parecer complicado. Pero precisamente debido a su dificultad, estos vdolky son tan especiales.
Una señora del sur de Bohemia recuerda: “Mi abuela siempre hacía vdolky los domingos por la tarde. Todos nos sentábamos a la mesa, esperando que los sacara del aceite, y discutíamos sobre quién recibiría el que tenía más requesón. Y cuando quedaba uno, siempre nos decía que ese era para la buena suerte."
Vdolky bávaros - parientes del otro lado de la frontera
Aunque nos pueda parecer que los vdolky son exclusivamente checos, encontramos postres similares también en nuestros países vecinos. Los vdolky bávaros, también conocidos como "Auszogne" o "Kiachl", son un pan tradicional en el sur de Alemania, especialmente en Baviera y Tirol. Se preparan con masa fermentada que se extiende en forma de disco delgado con un borde más alto y se fríen en grasa caliente. El resultado es un borde crujiente y un centro suave, que a menudo se rellena con mermelada o se espolvorea con azúcar.
La diferencia entre los vdolky checos y bávaros radica principalmente en la textura y la preparación. Mientras que los vdolky checos son más como pasteles fritos en aceite, los bávaros son más delicados, con una masa más quebradiza. Además, a menudo se sirven dulces o salados, por ejemplo, con chucrut, una combinación que puede sorprender, pero que definitivamente no ofende.
Su popularidad en Alemania es comparable a la nuestra: suelen formar parte de los mercados, festividades y celebraciones populares. Gracias a estos intercambios culturales, se demuestra cuán similares son nuestros gustos en toda Europa.
Vdolky hoy - sabor tradicional con estilo moderno
Aunque pueda parecer que los vdolky pertenecen más al pasado, en los últimos años han experimentado un renacimiento. Muchas cafeterías y pastelerías están regresando a la repostería tradicional y ofrecen sus propias variaciones, a menudo con un giro moderno. En los platos podemos encontrar vdolky con mascarpone, espuma de frambuesa o incluso una versión salada con queso de cabra y rúcula.
La creciente popularidad de la repostería casera durante la pandemia ha ayudado a que las personas vuelvan a las recetas probadas, entre las que sin duda se encuentran los vdolky. Y gracias a este regreso a las tradiciones, también crece el interés por la receta antigua de vdolky, como los hacía nuestras abuelas.
¿Y por qué no? En estos tiempos acelerados, preparar vdolky caseros es no solo una forma de disfrutar, sino también de ralentizar, desconectar y estar presentes en el momento. Mezclar la masa, esperar a que fermente, colocarlos cuidadosamente en el aceite, todo nos enseña paciencia y la alegría de crear.
Receta para vdolky tradicionales checos
Para aquellos que quieran intentar preparar vdolky caseros según la receta de la abuela, ofrecemos una guía sencilla. No esperes milagros en cinco minutos. Pero precisamente ahí reside la belleza: el trabajo honesto trae frutos dulces.
Ingredientes:
- 500 g de harina común
- 250 ml de leche tibia
- 40 g de levadura fresca
- 2 yemas de huevo
- 50 g de azúcar
- 60 g de mantequilla
- una pizca de sal
- ralladura de limón (opcional)
- mermelada de ciruela, requesón, crema agria, azúcar glas para decorar
- aceite vegetal para freír
Instrucciones:
- Desmenuzar la levadura en la leche tibia con una cucharadita de azúcar y dejar crecer la levadura.
- Mientras tanto, preparar la masa: tamizar la harina en un bol, añadir las yemas, el azúcar, la mantequilla derretida, la sal y la ralladura de limón.
- Verter la levadura y trabajar una masa suave, dejar fermentar durante aproximadamente una hora en un lugar cálido.
- Extender la masa fermentada en una hoja de aproximadamente 1,5 cm de grosor y cortar círculos.
- Dejar fermentar brevemente y freír por ambos lados hasta que estén dorados en aceite caliente.
- Después de freír, dejar escurrir en una servilleta, untar con mermelada, espolvorear con azúcar o añadir crema o requesón.
¿El resultado? Vdolky dorados, suaves y fragantes, que deleitarán a todos. Ya sea que los comas con el café del domingo, como un dulce para los visitantes o simplemente por gusto, te devolverán la calma y el gusto por la vida.
El recuerdo de los vdolky de la abuela tal vez evoque la imagen de una cocina llena de risas y aromas. Pero no hay razón para quedarse solo con recuerdos. Con unos pocos ingredientes, un poco de paciencia y el aroma del hogar regresará.